Encontrar trabajo con más de 45 años
Encontrar trabajo
no es fácil y cuando se tienen 45 años o más es más difícil,
esto en la mayoría ocasiones por una serie de creencias y tópicos difíciles de
superar, que se pueden resumir en los siguientes puntos:
- Temor a que el salario sea más alto, debido a la experiencia.
- Desface en la formación con respecto a las exigencias del mercado laboral, especialmente en lo relativo a la digitalización
- Suposición de que la capacidad de adaptación es menor que la de una persona más joven.
Tópicos que dejan de lado las razones para contratar a personas de 45 años o más, con valiosas cualidades como la experiencia, la templanza, la madurez o la responsabilidad, que entre otras son:
- Lealtad y estabilidad- Capacidad de toma de decisiones
- Liderazgo
- Mayor capacidad de concentración
- Habilidad en formar equipos y conexiones
- Mayor productividad
- Menor índice de absentismo
- Intergeneracionalidad, mentoría para las personas más jóvenes
- Experiencia y talento, probada y demostrable
- Capacidad de resiliencia e inteligencia emocional
- Mayor número de contactos
- Madurez, sabiduría, estabilidad e independencia
- Flexibilidad en la remuneración, en especial cuando se lleva cierto tiempo sin trabajo
Como se puede ver las razones son muchas, además hay bonificaciones para las empresas que contraten a mayores de 45 años.
Según el
Informe del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) “Mercado de Trabajo de
los Mayores de 45 años”, del 2021, datos del 2020, las personas de más de 45 años
son el (48,15,3%) de la población activa. Y su tasa de paro es del
48,78 %, casi la mitad del desempleo total.
Los motivos
para la no contratación de personas de 45 años o más, son mayoritariamente estereotipos que tienen
solución. La Fundación Adecco da los siguientes consejos para que la búsqueda
de empleo sea más ágil y exitosa:
Reciclaje profesional. El mercado ha cambiado y hay que ser flexible, en base a las nuevas demandas laborales. Es necesario realizar cursos o recibir formación en aquellas áreas que tengan que ver con los intereses personales, y con la experiencia profesional personal. Una actualización de conocimientos será útil para reinsertarse profesionalmente en un mundo laboral competitivo, esto y la experiencia son un valor añadido.
Las nuevas
tecnologías son esenciales. Se recomienda básico, tener nociones mínimas de
Office y de navegación por internet.
Tener un buen currículum, este es como una carta de presentación, por lo que hay que cuidarlo al detalle. A partir de los 45
años se acumula mucha experiencia que hay destacarla ordenarla y sintetizarla.
Hay que redactar la
formación y experiencia laboral en orden cronológico inverso, es decir primero lo
más reciente. De esta forma la empresa verá primero lo más
recientes, que generalmente es lo que más interesan en un proceso de selección.
Un buen curriculum debe ser breve y conciso. En general con 45 años o más se tiene una extensa trayectoria profesional, por lo que hay que sintetizar y escoger sólo las experiencias más significativas y cualificadas, en base a la oferta de trabajo a la que se opta.
Hacer todo lo posible para ponerlo todo en una hoja.
Prepararse para pasar una buena entrevista de trabajo, antes de la entrevista buscar información sobre la empresa, hablar de forma clara sin hacerlo en exceso evitando la pasividad y la parquedad, mostrar interés por el trabajo, prestar atención (mirar a los ojos), preguntar lo que no se ha entendido. NO es correcto hablar mal de trabajos, ni de jefes, compañeros/as, etc., anteriores. Cuidar los detalles y la imagen personal.
Hay que destacar que tener más de 45 años aporta ventajas,
se tienen reforzadas cualidades como la responsabilidad, la madurez o el
control emocional, buscar el momento para destacar estos aspectos, señalando
que más importante que la edad, es la competencia personal y la trayectoria.
Todas las habilidades, experiencias vitales y atributos personales son activos
a poner en valor ante una entrevista de trabajo. Responder a las preguntas
neutralizando los inconvenientes planteados, positivando las nuevas capacidades
o habilidades a adquirir en el nuevo puesto de trabajo
Trabajar para trabajar, buscar trabajo es un trabajo en sí mismo. Hay que diseñar un plan de acción identificando todos los pasos necesarios, describiendo las acciones con el objetivo de encontrar empleo. Buscar en los portales de empleo de internet, en los anuncios en prensa, radio, televisión, inscribirse en el SEPE, Servei d’Ocupacio de Cataluña (SOC), ir a Agencias de Empleo o Fundaciones. Darse de alta en redes sociales (LinkedIn, Facebook o Twitter), esto además de dar la posibilidad de acceder a ofertas de empleo, hará que la percepción de la empresa sea la de una persona actualizada, preparada y dispuesta, evitando caer en el estereotipo de persona mayor de 45 años como demandante de empleo obsoleta, las redes sociales son una ventana al mundo exterior, a nuevos contactos, a nuevas ofertas. Además, no hay que descuidar la red de contactos, nunca se sabe dónde puede estar la oportunidad.
Buscar ayuda, en los Servicios Públicos
de Empleo, Asociaciones y otras entidades para la reinserción laboral, esto
tanto para hacer un buen currículum, como una pasar buena entrevista, también orientación
para reinsertarse y trazar un itinerario laboral. Además, para conseguir apoyo emocional
y empoderamiento, la situación de desempleo produce desanimo y falta de
confianza personal.
Mantener una actitud positiva. La negatividad es la peor compañera de viaje, si no se tiene éxito en varias entrevistas, hay que ser perseverante y aprender de los errores para hacerlo mejor la próxima vez. Ser realista y conocer bien las posibilidades, con el autoconocimiento las habilidades se entrenan y se mejoran. Seguir los consejos de personas expertas en el mercado laboral, en especial lo relacionado con la necesidad de itinerarios formativos y orientación hacia el reciclaje profesional. Se trata de trabajar duro para mejorar una situación de la que no se tiene la culpa, para poner en valor el potencial y las capacidades personales.
Desde Codema45 esperamos que estos consejos te ayuden a encontrar el trabajo que estás buscando.
Para más información
Tu edad es un tesoro.Fundación Adecco
Encontrar Trabajo con más de 45 años
Como Realizar una entrevista de trabajo exitosa
Claves para hacer un buen Curriculum
El paro de larga duración se dispara con el Covid en 360.000 personas
Los datos de empleo del segundo trimestre, -abril a junio-,
y la continuidad en julio son claramente positivos. Así se desprende de la
Encuesta de Población Activa (EPA) o los datos del registro del Sepe y de la
Seguridad Social. Sin embargo, un análisis más en profundidad de la encuesta
del INE arroja algunos datos preocupantes. Entre ellos, el alza desmesurada de
los desempleados de larga duración, aquellos que llevan entre uno y dos años
buscando infructuosamente un trabajo, y los de muy alta duración, que
sobrepasan los dos años. En conjunto, durante la pandemia (segundo trimestre de
2021 sobre el primero de 2020) se ha elevado en 360.500 el número de parados
que no encuentran empleo desde hace un año como mínimo. Un problema que señala
el Servicio de Estudios de la Confederación de UGT en un informe elaborado para
la Comisión Ejecutiva del sindicato.
El informe reseña que el grupo de desempleados de larga
duración (de un año en adelante) supuso en el segundo trimestre de este año el
49% de los trabajadores en paro. O, medido en personas, 1,735 millones. Si se
compara con el primer trimestre de 2020, cuando entró en vigor el
confinamiento, el porcentaje se ha elevado más de 15 puntos, pues entonces la
EPA contabilizó como parados de larga duración al 35,9% del total de parados,
1,142 millones.
No obstante, el dato del segundo trimestre del pasado año,
así como el de los siguientes, está desvirtuado por la metodología de la EPA.
El INE exige para contabilizar a una persona como parada que haya realizado una
búsqueda activa de empleo durante el trimestre analizado. Con el confinamiento
y otras medidas restrictivas, muchos desempleados no pudieron cumplir tal
requisito. Por tanto, la EPA los consideró como inactivos y no parados, lo que
explica la fuerte reducción del paro de larga duración en aquel trimestre de
2020.
Para hacer una comparación homogénea hay que enfrentar los
datos de este segundo trimestre con los del segundo trimestre de 2019, en
ausencia de Covid. Aun así, los datos siguen siendo preocupantes, en opinión de
UGT. Entonces la EPA contabilizaba 1,458 millones de personas en paro de larga
duración, equivalente al 45,13% del total de los parados. Es decir, que
actualmente hay 277.600 personas más que superan los 12 meses en búsqueda de
empleo en comparación del segundo trimestre de 2019.
El paro de larga duración ha crecido especialmente entre
aquellos que llevan entre 12 y 24 meses en desempleo y se ha mantenido más
estable entre los que superan los 24 meses. Así, a finales de junio eran cerca
de 800.000 las personas buscando entre un y dos años, lo que supone 400.000
personas más que hace un año, pero cerca de 350.000 si se compara con el mismo
periodo de hace dos años.
Sobre los que superan los 24 meses, en junio eran cerca de
940.000, lo que supone 193.000 más que en 2020, pero 69.000 menos que en el
segundo trimestre de 2019.
El desempleo de larga duración no es el único problema que
resalta el Servicio de Estudios del sindicato de la Unión General de
Trabajadores. También el efecto sobre las mujeres del empleo oculto (tasa
ampliada de desempleo, que incluye además a las personas inactivas que
trabajarían en caso de tener una oportunidad y a los trabajadores a tiempo
parcial involuntario). Esta medición sitúa el desempleo en el 23,7%, 8,5 puntos
por encima de la tasa de paro.
Otro de los efectos en el mercado laboral que se ha
disparado con la pandemia es el número de empleados a tiempo parcial que
desearían trabaja a jornada completa. Como resalta el informe del Servicios de
Estudios de UGT, el número de ocupados a tiempo parcial ha crecido un 5,1%
hasta sumar el 14,4% de todos los asalariados. Los jóvenes vuelve a ser el
colectivo más perjudicado, pues se eleva al 41% de los ocupados. De la
totalidad, el 54,1% desearía tener un empleo por 8 horas diarias y no reducido.
En el caso de los asalariados entre 25 y 35 años, los que preferirían un empleo
a jornada completa, pero que no lo encuentran, suponen las dos terceras partes.
FUENTE: ElEconomista
Principales prestaciones en situación de desempleo
La Seguridad Social es un sistema de previsión que garantiza cierta cobertura a todos sus beneficiarios, que son los ciudadanos de un país. Se basa en un sistema de solidaridad intergeneracional, también conocido como sistema de reparto, que exige a los actuales pensionistas haber aportado su granito de arena (haber cotizado) al sistema durante el tiempo en el que se ha trabajado. Estas prestaciones se conocen como pensiones contributivas. En determinadas circunstancias, la Seguridad Social ofrece la posibilidad de acceder a una prestación incluso sin haber cotizado o contribuido previamente al sostenimiento del sistema. Estas son pensiones no contributivas, a las no es necesario haber cotizado previamente para poder disfrutar de ellas.
Generalmente constituyen un derecho de contenido dinerario que, una vez reconocido cuando se reúnen determinadas condiciones, se integra en el patrimonio de la persona beneficiaria, en las contingencias o situaciones protegidas previstas en la Ley. Es dividen en 4 grupos.
- Pensiones, son prestaciones económicas de devengo periódico y de duración vitalicia o hasta conseguir una edad determinada.- Subsidios, prestaciones de devengo periódico y de duración temporal.
- Indemnizaciones, prestaciones económicas abonables por una sola vez.
- Prestaciones por desempleo, estas se pueden solicitar al Servicio Público de Ocupación Estatal (SEPE), es necesario estar inscrito/a en la Oficina de ocupación y estar en busca activa de ocupación.
Las ayudas por desempleo son:
Prestación por desempleo
Se trata de una ayuda económica para las personas que han perdido involuntariamente su trabajo y tienen 360 o más días de cotizaciones por desempleo sin consumir.
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Renta Activa de Inserción (RAI)
Es una ayuda para personas desempleadas durante más de 45 años, que no encuentran trabajo durante mínimo un año. Es no contributiva, el 80% del IPREM, 451 euros en el mes. Dura once meses se cobra un año si y un año no, hasta 3 periodos, es decir se puede renovarla 3 veces.
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Subsidio Extraordinario por Desocupación (SED)
Es una prestación del SEPE que nació para sustituir al Plan PREPARA. Se cobran 451 euros en el mes durante 6 meses (180 días). No se puede renovar aunque se cuente con cargas familiares.
En la hora de solicitarlo se tiene que demostrar que se está dado de alta como demandante de empleo, y que no se ha dejado pasar ninguna oportunidad laboral.
Se necesario demostrar que no se cobra RAI y cualquier otro ayuda social. Se puede compaginar con un contrato de trabajo a tiempo parcial, el que se tiene que notificar Servicio de Empleo de la Comunidad Autonoma de residencia.
Para ver requisitos, duración y como solicitarlo clicar aquí
Subsidio para personas de más de 45 años
Los requisitos su tener más de 45 años, haber agotado la prestación contributiva (el paro), no tener rentas, ni responsabilidades familiares
Para ver requisitos, duración y como solicitarlo clicar aquí
Subsidio de mayores de 52 años
Se requisitos su tener 52 años o más en la fecha en que se agote la prestación por desocupación o el subsidio por desempleo, o tenerlos en el momento de reunir los requisitos para acceder en alguno de los siguientes subsidios: por agotamiento de la prestación contributiva, emigrando devuelto o devuelta, revisión por mejora de una invalidez, liberado o liberada de prisión o cotizaciones insuficientes para la prestación contributiva; también si cumple los 52 años mientras está percibiendo alguno de estos subsidios en el momento de la solicitud y cumplir con los requisitos para jubilarse (excepto por la edad), se cobran 451 euros en el mes.
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Ingres Minim Vital (IMV)
Es una ayuda social para las familias en situación de pobreza, sin trabajo y sin ingresos. Aunque nació en medio de la pandemia del Covid-19, ha llegado para quedarse. Se solicita a la Seguridad Social.
La cantidad a cobrar con esta prestación no contributiva depende de la renta y del número de personas que vivan con la persona solicitante a la unidad familiar.
El importe de IMV es de 470 euros mensuales para una persona que viva sola, y puede llegar a los 1.033 euros en el supuesto de que la familia sea de cuatro adultos y un niño.
Al presentar la solicitud hay que'esperar el estudio del caso y la aprobación del IMV.
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Prestación por desempleo de nivel asistencial
Este subsidio lo pueden pedir las personas desempleadas de larga duración, que estén inscritas como demandantes de empleo durante un mes, sin haber rechazado ninguna oferta de trabajo adecuada, ni haberse negado a participar, excepto causa justificada, en acciones de promoción, formación o reconversión profesional.
No se tienen que tener rentas de cualquier naturaleza superiores, en cómputo mensual, al 75% del Salario Mínimo Interprofesional vigente, excluida la parte proporcional de las pagas extraordinarias.
La ayuda es de 451 euros mensuales (el 80% del IPREM), cubre las cotizaciones sanitarias, de ayudas familiares y jubilación.
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Ayudas Por la Crisis del Coronavirus
Prestación especial para trabajadores afectados por un Expediente Expediente de Regulación Temporal de Ocupación (ERTE)
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Prestación especial para autónomos por cese o disminución de actividad
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Rentas Mínimas de Inserción (RMI)
Se denominan (RMI) a los diferentes programas que tienen las comunidades autónomas y ciudades ceutíes y Melilla dirigidos a las personas y familias que carecen de recursos económicos suficientes para cubrir sus necesidades básicas. Van acompañados de un proceso de intervención social, en algunos casos estos programas se vinculan además con procesos de inserción laboral.
Esta prestación económica recibe diferentes nombres en función de la comunidad autónoma, como por ejemplo salario social básico, ingreso mínimo de inserción, renta garantizada, etc. Como parte del Sistema público de Servicios Sociales, es una competencia exclusiva de las Comunidades, por lo cual cada una de ellas establece diferentes formas de acceso, requisitos exigidos, medidas complementarias su duración o su cuantía, entre otras.
En Cataluña esta La Renda Garantizada (RG)
Para ver requisitos sobre RG, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Ayudas mujeres embarazadas
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí
Otras ayudas
Son de casi 540 euros en el mes y varían según las necesidades del demandante.
Ayuda familiar: dirigida a personas con responsabilidad familiar -hijos menores de 26 a cargo suyo- que ya han agotado las prestaciones por desempleo, y no tienen otras rentas. La ayuda puede durar de 18 a 30 meses.
Subsidio por cotización insuficiente / Subsidio por pérdida
de ocupación: Esta ayuda va dirigida a aquellas personas que han perdido su
trabajo y no tienen acumulados un mínimo de 360 días de cotización. Puede durar
desde tres meses hasta veintiuno.
Para ver requisitos, duración y donde solicitarlo clicar aquí.
Subsidio por revisión de una incapacidad: Para personas sin ingresos que han tenido una enfermedad pero que están mejorando y por este motivo se los retira la ayuda de incapacidad permanente. Dura desde seis a dieciocho meses.
Subsidio para liberados de prisión: Para personas ex encarcelados que hayan cumplido su condena y no tengan derecho a otras prestaciones. Se puede prolongar desde los seis hasta los dieciocho meses.
Subsidio por emigrantes devueltos: Para quienes vuelven a España después de haber estado trabajando fuera en países que no tienen convenio bilateral o que no pertenecen en el Espacio Económico Europeo. La ayuda puede durar de seis a dieciocho meses.
Subsidio y renta agraria: Para tabajadores eventuales agrarios en Andalucía o Extremadura. El máximo que puede durar son 300 días, siempre dependen de la edad y las responsabilidades familiares que tenga.
Por más información sobre prestaciones:
En España hay cerca de cuatro millones de personas
desempleadas (3949.640). Son 400.000 personas más que cuando comenzó la
pandemia. Insistentemente se habla del desempleo juvenil que roza el 40%
duplicando las tasas medias de los 19 países de la zona euro. Sin embargo,
parece que nos hemos olvidado de otro grupo de edad aún más castigado. Sobre todo,
porque para este colectivo cumplir años es alejarse cada vez más de la esperanza de
encontrar un empleo. Nos referimos a los mayores de 55 años.
Es el grupo más afectado por el desempleo de larga duración
en España. De hecho, España tiene la
tasa de paro en los mayores de 55 años más alta de los 37 países que componen
la OCDE.
Las personas afectadas tienen que sobrellevar lo que
consideran es una discriminación por edad. De hecho, parece tan común, que
ya los expertos han puesto un nombre a esa marginación: "edadismo"
como nos la apunta Alfonso Jiménez, socio de la firma de cazatalentos Exec
Avenue. De hecho, ¿contrataría a un
diplomado en empresariales, con cursos en derecho tributario, ex propietario de
varias empresas, ex director de sucursal bancaria que ha estado destinado en la
división de banca internacional? El
sueldo que pide es de mil euros lo que para él sería "una lotería".
Sin embargo, nadie le contrata. Se llama Antonio Marcos, tampoco a Maria Luisa
cocinera de 55 años con cursos de cocina en la escuela de hostelería de
Madarcos. Ni a José Cristóbal de 59 años que, con 30 años en la hostelería, maître,
gestión de equipos de 20 personas, catador de aceites.
Todos ellos y muchos miles más se han reunido en plataformas
a través de redes sociales o cuentas de Twitter. Por falta de ingresos muchos
viven a su edad en pisos compartidos o en apartamentos muy reducidos. Su
situación es de las más complicadas del mundo laboral porque como dice Maria
Luisa, cada cumpleaños es un paso atrás. Por eso, para que empiecen ser pasos
hacia delante proponen que si en otros casos del mercado laboral hay cupos de
contratación para mujeres o discapacitados para evitar su discriminación
laboral también exista con mayores desempleados.
Fuente: ABC
Hay que mantener los ERTE mientras el empleo lo requiera
Los datos de paro publicados hoy por el Servicio Público de
Empleo (SEPE), correspondientes al mes de marzo, muestran un descenso del paro
de 59.149 personas, lo que sitúa la cifra total de personas desempleadas en
3.949.640. Este descenso se debe a las menores restricciones que ha habido en
marzo respecto a febrero y al inicio de la Semana Santa, además de ser un mes
tradicionalmente favorable para el empleo.
Para la Unión General de Trabajadores, las medidas
restrictivas deben continuar hasta alcanzar la inmunidad colectiva. Evitar una
cuarta ola de contagios, que induzca a nuevas paralizaciones de la actividad y
someta a más tensión a la economía, es clave si se pretende que la temporada de
verano sea un éxito, esencial para la economía española.
Para ello, el sindicato considera imprescindible acompañar
en estas dificultades a los hogares y a las empresas que están en peores
situaciones, reforzando y ampliando las vías de ayuda existentes y no dejando a
nadie atrás. Los ERTE han de seguir mientras sea necesario, manteniendo las
rentas de las personas que no han podido volver a recuperar la actividad en su
puesto de trabajo.
Además, ante el incremento del desempleo y el mayor riesgo
de paro de larga duración, sobre todo entre colectivos más vulnerables (hay que
tener en cuenta que un 57,7% de las personas en desempleo son mujeres y un 9%
jóvenes), es necesario acelerar la reforma de las políticas activas de empleo,
reforzando urgentemente los Servicios Públicos de Empleo, al tiempo que se
garantiza la protección social. Y también habrá que dotar de los recursos
dispuestos para ayudar a las empresas con la mayor prontitud posible para
evitar la destrucción de nuestro tejido productivo, que será esencial para la
recuperación.
UGT considera que el Plan de Recuperación, Transformación y
Resiliencia debe ser el punto de inicio en el que se cimente una conversión de
nuestro modelo laboral y productivo a un entorno con el empleo de calidad como
protagonista.
Además, para alcanzar un modelo económico distinto, el
sindicato manifiesta la necesidad de acometer cambios profundos, comenzando por
derogar la reforma laboral de 2012, por sus efectos lesivos sobre los trabajadores
y trabajadoras, y negociando un nuevo marco regulatorio que establezca unas
condiciones más favorables para la persona empleada.
Los datos de desempleo conocidos hoy muestran una variación
interanual del paro del 11,31%, más de 10 puntos menor a la que hubo en febrero
por el mejor comportamiento del empleo y el efecto base de comparación, ya que
en marzo del año pasado comenzamos a ver los primeros efectos de la pandemia.
Respecto a febrero, el descenso se cifra en un –1,48%.
En cuanto al número de beneficiarios de prestaciones, en
febrero había 2.359.191 personas en esta situación, lo que supone un 17,8% más
que en el mismo período del 2020. La causa de este aumento en la protección se
encuentra fundamentalmente en los ERTE.
En lo que respecta al empleo, en el mes de marzo la
afiliación a la Seguridad Social ha aumentado en 70.790 personas, mientras el
dato desestacionalizado muestra 45.438 personas menos. No obstante, en términos
anuales la variación se traduce en un descenso de 86.366 personas afiliadas
respecto a marzo del año pasado, un 0,45% menos. Los ERTE explican que la
pérdida en la afiliación respecto al año anterior no sea tan pronunciada, ya
que según la Seguridad Social marzo finalizaba con 745.615 personas bajo su
protección, 113.926 menos que a fin de febrero.
Por su parte, la contratación en el mes de marzo, como ha
sucedido con el empleo, se ha incrementado. El repunte en este caso ha sido de
un 15,82% respecto al mes de febrero.
El número de contratos indefinidos, en porcentaje sobre el
total de contratos que hubo en marzo, es del 14,76%. Dentro del total de
contratos indefinidos hay una parte de ellos que ha sido a tiempo completo,
concretamente un 62,16%, y otra que ha sido a tiempo parcial, un 27,72%. Esto
significa que sólo 9 de cada 100 contratos son indefinidos a tiempo completo.
Mientras que los contratos bajo la modalidad de obra y servicio y eventuales
por circunstancias de producción supusieron el 76,67% del total de la
contratación, una característica propia de nuestro modelo laboral en el que la
incertidumbre económica se traduce en contratos inestables y de peor calidad.
Dentro de los factores que generan esa incertidumbre se
encuentran dos variables sanitarias, como es lógico durante una pandemia, la
vacunación y la evolución de los contagios. Es importante destacar un reciente
cambio en las expectativas de la vacunación cuando la Unión Europea informó que
haría todo lo que fuera necesario para que España tuviera las vacunas que
necesita, continuando con el buen ritmo de vacunación que tiene España si se
compara con el resto del entorno europeo.
En marzo, respecto al mes anterior, ha descendido en 32.469
el número de hombres registrados como desempleados (un 1,91% menos), mientras
el paro femenino lo ha hecho en un porcentaje menor, siendo menor también en
términos absolutos (26.680 desempleadas menos, un 1,16% menos). En el año el
desempleo masculino subió un 9,33% (142.599 parados más) y el femenino lo hizo
un 12,81% (258.729 desempleadas más). El 57,7% de las personas en desempleo son
mujeres.
En marzo estaban registrados 357.793 jóvenes (un 9% del
total de desempleados). El desempleo entre los menores de 25 años ha descendido
un 2,35% mensual (8.610 parados jóvenes menos en este mes), y en términos
anuales asciende un 24,42% (70.233 jóvenes).
Por lo que respecta a los trabajadores extranjeros, el
descenso ha sido menos pronunciado. En este caso el número de personas en
desempleo baja en el mes un 1,07% (siendo menor entre las mujeres en términos
relativos y absolutos), hasta alcanzar la cifra de 584.165 personas
desempleadas (un 14,79% del total de desempleados). En la variación anual se
observa también un incremento del 31,7%, 140.611 trabajadores extranjeros
desempleados más.
Por sectores, en marzo el paro registrado desciende en todas
las actividades productivas menos en la agricultura, que se incrementa: en la
construcción (7.685 desempleados menos, un 2,46% menos), en los servicios
(53.686; un -1,89%), y en la industria (3.675; un -1,16%). Sin embargo, en la
agricultura asciende en 2.368 personas, lo que supone un 1,24% más. En el
colectivo sin empleo anterior se observa un aumento del desempleo (suma 3.529,
un 1,00%). En el año se incrementa el paro en el conjunto de sectores, a
excepción de la construcción que disminuye en 14.903 personas desempleadas, un
-4,67%.
La afiliación a la Seguridad Social se incrementa en el mes:
70.790 afiliados más en marzo respecto a febrero, un 0,38% más, aumentando
hasta 18.920.920 afiliados (de media en el mes). No obstante, la variación
mensual desestacionalizada ha sido opuesta, dejando 45.438 afiliados menos.
El número total de contratos registrados en marzo se
incrementa un 15,82% respecto a febrero, situándose la cifra total en 1.404.107
contratos firmados. Los contratos indefinidos ascienden un 56,45%, mientras los
temporales aumentan en un 10,84%. Si lo comparamos con los registrados en marzo
de 2020, el volumen del total de contratos aumenta un 11,75%, los temporales lo
hacen un 7,72% y los indefinidos en un notable 42,50%. Este mes la proporción de
indefinidos sobre el total de contratos se sitúa en el 14,76%, mostrando una
mayor debilidad en la actividad de los sectores más propensos a la
temporalidad.
En el mes crece en mayor medida el volumen de los contratos
indefinidos a tiempo parcial (un 61,05%), frente al resto: los indefinidos a
jornada completa ascienden un notorio 49,48%; mientras tanto los temporales a
jornada parcial aumentan un 27,80% y los temporales a tiempo completo lo hacen
más ligeramente, concretamente en un 4,52%.
La modalidad de indefinidos a tiempo completo ocupa sólo un
9,17% sobre el total de contratos registrados en el mes de marzo. Mientras, el
peso de los contratos a tiempo parcial sobre el total de contratos se mantiene
en el 30,77%.
En el mes de marzo, el número de beneficiarios de
prestaciones ascendía a 2.359.191, un 17,8% más que en el mismo mes de
referencia de 2020. Con este nivel de protección adicional para las personas
empleadas amparadas por un ERTE, la tasa de cobertura del conjunto del sistema
de protección se sitúa en el 62,92%, 3,1 puntos menos que en 2020.
La Seguridad Social señala que a 31 de marzo había 745.615 afiliados protegidos por un ERTE, 113.926 trabajadores menos que a fin de febrero.
Fuente: UGT
Quienes somos:
Estatutos
Entidades que conforman CODEMA 45
- Asociación de Parados Mayores Activos (Santa Coloma Gramenet)
- Asociacion Parados Onubenses
- AsociaciónParadosEmprendedores (Palma de Mallorca)
- Associació de Persones Aturades +45 Anys (Assat50) (l'Hospitalet de Llobregat)
- Col.lectiu d'aturats del Baix Penedès.
- Di-GAM
- Plataforma Civica Contra la Discriminacion Por Edad
- Plataforma por el empleo La Isla (Cadiz)
- SiempreActivosAlbacete
- T'Acompanyem - Barcelona
- WisePeople (Sant Cugat del Valles)
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